jueves, 13 de agosto de 2015

Cachitos de "periodismo" XIV

Tenía que pasar... Y ha pasado. Tras el lamentable suceso de Cuenca en el que dos chicas han aparecido muertas en una zanja rociadas con cal viva, algunos medios han vuelto a caer en el error de culpabilizar sin la debida presunción de inocencia. El periodismo debe servir para analizar los hechos y mostrarlos a la opinión pública tal y como están sucediendo, creando una corriente de opinión, pero no para dar la opinión como dogma de fe... Ejemplo:


El cruel asesino de las jóvenes de Cuenca quiso borrar huellas quemando en cal los cadáveres


El artículo que lleva por titular esta frase (que por cierto, está mal estructurada) ha aparecido hoy en www.albaceteabierto.es portal de información de aquella capital castellano-manchega. De un plumazo elimina la presunción de inocencia en el titular, incluyendo además el epíteto "cruel" para añadir aún más leña al fuego del debate público que rápidamente incrimina al presunto culpable. Ahora, veamos una contradicción en el subtítulo con respecto al titular...

Los cadáveres estaban en un paraje cercano al río Huécar, boca abajo y con resto de quemaduras y cal. Eso supone que el asesino o asesinos intentaron quemar los cadáveres con cal para borrar las huellas.

Ya aquí vemos que el redactor "supone" que hay un asesino o asesinos, con lo que invalidaría el titular. Aparte, incurre en redundancia al no aportar información novedosa. Por el titular ya sabemos que los cadáveres de las chicas habían sido rociadas con cal viva.

La mezcla de información y opinión es otro elemento del texto a tener en cuenta y que todo buen periodista debe eliminar de su forma de proceder (por no hablar ya del código deontológico). A saber...

Por lo que se puede ver en las redes sociales de Sergio Morate, parece que cuidaba más el físico que el cerebro. 

La reiteración en la redacción del texto es un error de principiante, tratando el redactor de hacer hincapié en la culpabilidad del principal sospechoso del crimen. Lo deslavazado del artículo implica una nula interpretación de los hechos probados y muestra que el copia/pega ha sido la principal herramienta en su confección. Lastimosamente, todos estos errores, en especial en la de anular la presunción de inocencia de los sospechosos, es común en nuestros medios de comunicación. Cabe pensar si hemos dejado la responsabilidad de la información en gente mal formada o en simples desconocedores de la más mínima realidad procesal.

(Este artículo ha sido elaborado con la ayuda de Manuel Lorenzo).

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