lunes, 6 de septiembre de 2010

LA MISMA PALABRERÍA HUECA


L
o decíamos ayer en este mismo espacio. Deponer las armas y entregarse a la Justicia. Esa es la única salida que le queda a los asesinos. El resto, el discurso típico independentista y victimista aderezado con unas cuantas dosis de odio hacia todo lo que huela a español, es el vestido que los terroristas siguen utilizando a pesar de encontrarse en coma profundo tras una lucha sin cuartel planteada desde el Estado de Derecho con las herramientas de la ley.

ETA decreta un alto al fuego. Bien, ¿y qué? Se supone que los que blanden pistolas quieren ahora un gesto de cesión por parte de las instituciones democráticas, en este caso, el Gobierno español. Pero la ceguera que sufren desde hace años les impide ver que quienes tienen que hacer gestos no son los que están de parte de la ley, si no ellos mismos que han asesinado, torturado y maniatado la voluntad de los vascos (y del resto de españoles) durante tantos decenios. Con un gesto basta: dejar las armas de forma incondicional. No valen excusas, no cabe la palabrería hueca y vana de los comunicados etarras. No valen las capuchas. No vale ETA como interlocutora para solucionar el problema vasco porque ETA misma se ha desautorizado utlizando la violencia para obtener fines políticos.

Parece que la izquierda abertzale se ha dado cuenta (tan tarde), de que la banda terrorista es una rémora, un parásito que ha estado alimentándose de una prefabricada refriega política en la que las armas siempre imponían la última palabra. Ahora quiere soltar lastre invocando un alto al fuego permanente y verificable. Pues ni una ni otra cosa. ETA cesa el fuego y ya está. Pero no hay nada nuevo bajo el sol. Con la acción judicial y policial, ETA ya había cesado sus acciones porque simplemente estaba asfixiada. No hay que dar pábulo por tanto, a cierto tipo de demagogia con mucha forma, pero sin ningún fondo. Los demócratas esperamos sin bajar la guardia. ETA ya sabe lo que tiene que hacer. Ahora es hora de que lo haga.

No hay comentarios: